Un vehículo robado quedó incrustado en la Tercera Compañía de Bomberos de Lirquén tras protagonizar una persecución policial desde la comuna de Talcahuano.

El personal bomberil de turno estaba en reunión cuando sintieron el choque del Jeep que tenía encargo por robo.

El incidente, que no dejó a personas lesionadas, terminó con dos menores de edad -de 16 y 17 años- detenidos.

El vicesuperintendente de Bomberos de Penco, Marcos Parada, confirmó que habían varios elementos posiblemente robados en el vehículo.

El vehículo golpeó parte de una cerco de una casa contigua y quedó a metros de golpear un carro de Bomberos. Mientras que la cortina metálica de la sala de máquinas, renovada hace muy poco, quedó totalmente destruida.