Fue el fin de semana del 8 y 9 de febrero de 2014 cuando el fuego arrasó por completo el pabellón número 3 de la población Pedro Bannen y 10 viviendas en Agua Potable en Lota. Los siniestros conmocionaron a la comunidad, tanto por la muerte de un adulto mayor como por lo seguido de ambos eventos.
Los vecinos estaban confiados en que no pasaría más de un año para que tuvieran una solución definitiva, no obstante, han pasado tres años y aún no existe una casa nueva en Bannen ni en Agua Potable, donde aún permanecen las paredes calcinadas y los escombros del incendio.
Los vecinos piensan que si hubiese ocurrido en otra ciudad, como una capital regional o Santiago, la situación sería diferente, señaló Luisa León, dirigente del comité de Agua Potable.
La ayuda del Gobierno consistió en subsidios de arriendo por dos años, mientras se desarrollaba el trámite habitacional.
Sin embargo, en noviembre caducaron los subsidios, lo que obligó a cada vecino a costearlos con sus propios recursos, detalló Verónica Sepúlveda, presidenta del comité Pabellón 3 de Bannen.
Los vecinos temen que la situación se prolongue por más meses, ya que dependen de que los dineros de ambos proyectos se aprueben para recién ahí poder contar con una próxima remesa para sus subsidios.
