El intendente de la región del Bío Bío, Rodrigo Díaz, hizo un nuevo balance del territorio calcinado por los incendios forestales en la zona y las cifras continúan aumentando: más de 71.000 hectáreas están afectadas en la región.

Gracias a un avión del Ejército, la Conaf pudo sobrevolar algunos sectores que antes el viento y el humo no permitían ver para realizar un nuevo cómputo de superficie calcinada.

Díaz recordó que la Alerta Roja comenzó el pasado sábado 21 y, desde ese momento, se extinguieron 39 fuegos “entre los que, cabe destacar, que se encuentran el de Bulnes y Mulchén”.

Las viviendas destruidas por las llamas, hasta las 17:00 horas del domingo, son 128. Además, cuatro sufrirían un gran daño y otras 10 fueron catalogadas como “daño menor habitable“.

Unión de incendios

Una de las cosas que más preocupa al intendente es que algunos focos de incendio se están uniendo a otros que se encuentran próximos.

Este es el caso del fuego de Coelemu que se unió al de Rafael y ya abarcan 25.000 hectáreas o el de Hualqui que se juntó a otro en el sector Periquillo y ya suman 7.000 hectáreas.

El incendio de los puentes también se fusionó al de Penco cercano a la cárcel, conocido como Trinitarios-Vilumanque.

Mejoría

La autoridad también rescató datos positivos ya que hay 5 albergues menos debido a que mucha gente pudo volver a sus hogares.

“En las 30 escuelas que siguen siendo puntos de acogida, no llega a 200 las personas albergadas por no tener casa. La mayoría de personas alojadas son brigadistas: 495 voluntarios que se encuentran en la región sofocando las llamas”, apuntó Díaz.

En cuanto al suministro de agua, el intendente reveló que el estanque de Penco ya está al 70% de capacidad, lo que es “muy positivo ya que además de recuperar el servicio, volverán a tener presión de agua”, muy importante ya que la comuna cuenta con numerosos cerros.

Díaz finalizó informando de que se habilitaron dos centros de acopio más en el Infocap de Carrera en Concepción y el Polideportivo de Los Ángeles.