Ocho bandas delictuales desarmadas y 51 personas privadas de libertad es el saldo de los primeros cuatro meses de trabajo del Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos en la región del Bío Bío, iniciativa que fue impulsada por la Ley Corta Antidelincuencia y que saca cuentas alegres en la zona antes de expandirse a otras tres regiones en 2017.

El trabajo estuvo enfocado en delitos contra la propiedad e ilícitos de mayor connotación social, siendo resultado de la última agenda corta antidelincuencia.

El fiscal regional, Julio Contardo, destacó los beneficios de este nuevo sistema, como un trabajo profesional que sea mucho más eficiente en los sitios del suceso. “Contamos con herramientas que la ley de agenda corta nos ha permitido utilizar, como la interceptación telefónica, entre otras, que antes estaban destinadas a otro tipo de delitos”, dijo.

La unidad funcionó en siete comunas de la región, entre ellas Coronel, Concepción, Chillan y Talcahuano, con un amplio equipo humano, con 4 analistas, que informan y realizan el análisis criminal, junto a 7 fiscales encargados de implementar planes de persecución penal en cada foco declarado, según detalló José Patricio Aravena, fiscal jefe del SACFI en la región.

En 2016 el SACFI se implementó en las regiones del Bío Bío, O’Higgins, Valparaíso y La Araucanía; en 2017 se implementará en la Metropolitana, Aysén y Tarapacá y en 2018 llegará a todo el país, usando a las regiones pioneras como ejemplo para su desarrollo.