La central termoeléctrica Bocamina 2 sigue con sus operaciones detenidas en Coronel, cinco días después del amago de incendio que el viernes afectó a la caldera de la planta.
La empresa debe presentar, en los próximos días, la información requerida por los fiscalizadores de la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA).
La inspección en terreno del personal de la entidad fiscalizadora se registró el sábado, con el objetivo de analizar técnicamente el cumplimiento del Plan de Contingencia para Emergencias, que contempla la resolución de calificación ambiental.
La jefa de la oficina regional de la Superintendencia del Medio Ambiente, Emelina Zamorano, indicó que se verificó la paralización de la unidad afectada, como primera medida de control, y la contención del amago de incendio, procediendo los fiscalizadores a recabar información respecto de las posibles causas.
Con los antecedentes recabados en terreno, más los informes que se le solicitaron al titular -que tienen un plazo de cinco días hábiles para ser entregados- la Superintendencia continuará su investigación.
La empresa, en un informe al centro de despacho económico de carga sobre la indisponibilidad de Bocamina 2, señala una falla en la junta de expansión asociada a la caldera. Así lo confirmó a Radio Bío Bío, Mario Enero, responsable del área carbón de Enel Generación, al referirse a las causas del amago y a la condición actual de la planta.
Enero sostuvo que de acuerdo al avance de los trabajos que se realizan, Bocamina 2 debería estar a fines de esta semana realizando las pruebas antes de entrar en operaciones nuevamente.
