El peaje Huinanco, ubicado en la nueva ruta Cabrero-Concepción, en la comuna de Yumbel, no tiene la obligación de subir las barreras frente a la congestión vehicular porque no estaría estipulado en el contrato.

Largas filas de autos, tacos y bocinazos fue el escenario de vuelta a Concepción luego del fin de semana largo que debieron enfrentar cientos de automovilistas que decidieron regresar por la autopista que une a Cabrero con Concepción.

Los conductores se quejaron de la situación y critican a la concesionaria Valles del Bío Bío por no preocuparse de mantener personal para atender las casetas, o derechamente levantar la barrera, como se hace en el peaje Angostura, el que por contrato está obligado a abrir el paso al ingreso a Santiago.

El seremi de Obras Públicas, René Caravjal, al ser consultado sobre la posibilidad de levantar las barreras del peaje ante este tipo de situaciones, indicó que “todo se puede conversar”. En esa misma línea también sostuvo que la ruta estaba trabajando al 100% pero que claramente no cumplió con la expectativa.

Sin embargo, según fuentes de Radio Bío Bío, no estaría estipulado en el contrato que la empresa Valles del Bío Bío tenga que levantar las barreras en caso de alguna contingencia especial, situación que las autoridades tienen prevista sólo para quienes ingresan o salen de Santiago, lo que es una clara muestra – una vez más – del brutal centralismo que impera en nuestro país.

El intendente Rodrigo Díaz reconoció el problema y señaló que todo contrato puede ser perfeccionado y que se tratará de aplicar las mismas soluciones que en otros lugares del país, en clara referencia al peaje Angostura.

En tanto, desde la concesionaria Valles del Bío Bío indicaron que no se referirán al tema, sin embargo dijeron que tomarán las medidas del caso para los próximos fines de semana largo que vienen en octubre, todo esto en el sexto peaje más caro de Chile.