Una complicada situación enfrenta el Centro de Cumplimiento Penitenciario de San Felipe, en la región de Valparaíso, luego que un trabajo de remozamiento mal hecho en los baños del recinto provocara que fuera declarado inhabitable.

Según denuncias que habrían realizado los mismos gendarmes, las obras que fueron licitadas por más de 37 millones de pesos fueron abandonadas por parte de la empresa encargada, la Constructora y Servicios Berroeta SpA.

A raíz de esta situación, los cerca de 350 reos del lugar deberán ser reubicados para realizar obras correctivas que permitan el correcto funcionamiento del recinto.

La diputada del Partido Republicano por el distrito 6, Chiara Barchiesi, ofició a Gendarmería y al Ministerio de Justicia a esclarecer los hechos, todo en medio de la crisis de hacinamiento que vive el sistema carcelario nacional.

A través de un comunicado, desde Gendarmería informaron que la institución “iniciará trabajos de reparación y mantención en el Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de San Felipe. Debido a estas obras, será necesario redestinar temporalmente a los internos mientras se ejecutan los trabajos”.

Además, afirman que a través de un informe se detectaron deficiencias estructurales que deben ser abordadas a la brevedad.

Carlos Fernández, director nacional de la Asociación Nacional de Suboficiales y Gendarmes, se refirió a la situación, afirmando que existen los problemas estructurales y que los reos del penal deberán ser reubicados en la región.

La Radio se contactó con la Secretaría Regional Ministerial de Justicia, quienes no se refirieron al tema y optaron por remitirse al escueto comunicado entregado por Gendarmería.