A propósito de las situaciones que se viven en las cárceles del país, el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) visitó los centros penitenciarios de Putaendo y San Felipe, para conocer las distintas medidas que se han adoptado en el marco de la pandemia.
A diferencia de lo ocurrido en la Cárcel de Puente Alto, en donde se han denunciado pocas condiciones sanitarias, en la región de Valparaíso las medidas han funcionado, de acuerdo a la inspección que hizo el INDH.
Al menos en la Cárcel de Putaendo y de San Felipe, las medidas se han adoptado de manera correcta. El director regional del INDH, Fernando Martínez, indicó que incluso se han adoptado protocolos complementarios.
“La impresión que se ha tenido en esta visita, cuyo objetivo era evaluar la adopción de medidas en función de la pandemia de Covid-19, ha sido una impresión muy positiva”, manifestó.
En el Hospital de Putaendo se está a la espera de una ampliación del recinto. Mientras que en las cárceles de San Felipe y Putaendo, se sanitiza diariamente hasta tres veces al día.
Martínez señaló que también se han reforzado medidas respecto a las encomiendas y a la comunicación diaria de los internos con su círculo cercano. En ese contexto, destacó que se están realizando acciones para que se mantenga el contacto con el exterior.
