La emergencia actual por la que atraviesa el país producto del Covid-19, ha sacado a la luz otros graves problemas, la escasez hídrica que azota a gran parte de la región de Valparaíso.

En el valle del Aconcagua, el acceso este recurso se está entregando a las familias mediante camiones aljibes, algo que preocupa a los habitantes y autoridades.

Ante esto, el Ministerio de Obras Públicas ha implementado una serie de medidas para enfrentar la sequía que se vive en la región de Valparaíso y una de ellas son trabajos de canalización del río Aconcagua.

La idea es poder hacer una conducción más eficiente de las aguas, obras que fueron fiscalizadas en la comuna de La Cruz por el seremi del MOP, Raúl Fuhrer.

El encauzamiento del río Aconcagua se realizó en dos tramos. El primero, a través de una canalización continua de 13 kilómetros en la comuna de Panquehue y el segundo en las comunas vecinas de La Cruz y Quillota, con trabajos para extraer áridos y vegetación que dificultan el escurrimiento del agua y aumentar así su velocidad y cauce.