Diferentes reacciones políticas generó el ataque sufrido al cuartel de Carabineros en Valle Hermoso, en La Ligua, luego de confirmarse la presunta participación de un funcionario policial del propio cuartel en el hecho, siendo dado de baja y resultando detenido.

Hechos que fueron catalogados de montaje de parte de algunos parlamentarios, quienes además mostraron su preocupación por la vinculación que tiene el ex-carabinero con el presunto vandalismo en el retén de Villa Hermosa.

El senador Juan Ignacio Latorre catalogó como gravísimos estos actos e hizo un llamado al Gobierno y a la institución policial a que reconozcan que hay funcionarios que cometen actos delictuales.

Esta situación ha motivado la discusión respecto a reformar a Carabineros. En ese contexto, el senador Kenneth Pugh, perteneciente a la Comisión de Seguridad, indicó que es necesario reformar el proceso de formación y de selección, haciendo énfasis en que este tipo de hechos son aislados.

El diputado Diego Ibáñez, sostuvo que la reforma a Carabineros debe enfocarse en los Derechos Humanos y en la protección de la comunidad y no en la lógica del “enemigo interno” que funciona para la creación de montajes.

Por su parte, el diputado Andrés Celis indicó que lo más preocupante es que el excarabinero pueda estar relacionado con una red de contrabando de armas.

Inicialmente, en primera instancia se informó que el ataque se habría perpetrado en la madrugada del lunes cuando un grupo de aproximadamente siete personas ingresaron a la fuerza al recinto.

Momento en el que habrían golpeado a único efectivo que estaba de guardia, sin embargo, debido a las inconsistencias en su relato se abrió un sumario que terminó con su expulsión de la institución y detención.