La Corte Suprema condenó al Fisco a pagar una indemnización total de $ 160 millones a la madre y hermanos de una adolescente que se suicidó en el Centro Lihuén del Servicio Nacional de Menores (Sename) en la ciudad de Limache.

En fallo unánime, la Tercera Sala del máximo tribunal confirmó la sentencia por falta de servicio del Estado y descartó responsabilidad de la adolescente debido a que padecía una aguda patología mental y de un severo cuadro de abstinencia, lo que no le permitía tener conciencia de sus actos.

En efecto, el fallo expone que la fallecida, P.E.D.G., fue internada forzosamente en un recinto del Sename y no tenía la capacidad mental y volitiva necesaria para resguardar su propia existencia, hacerse cargo de su propia persona y de proyectar las consecuencias de sus actos.

Dicha situación ponían en riesgo inminente su vida, “situación que era conocida por el órgano administrativo que la tenía bajo su cuidado desde el momento en que fue internada y en cuyas dependencias realizó un intento de suicidio frustrado”, consigna el escrito

En esa línea, se añade que “pese a tener cabal conocimiento de estos antecedentes, el Sename no desplegó una mínima diligencia a fin de evitar el resultado dañoso, como, por ejemplo, evitar o dificultar el acceso de la interna a medios conocidamente destinados a provocar la propia asfixia, disponer su vigilancia permanente, atendidos sus antecedentes conductuales o algo tan pedestre como remover los cordones de sus zapatillas”.

“En suma, el infortunado evento no se debió a un acto consciente de la víctima, cuya culpa pueda compensarse con la del organismo estatal, sino que exclusivamente a la inobservancia por parte de este último del deber de vigilancia y seguridad que le incumbe”, sentencia el documento.