Rapa Nui entró en estado de latencia debido a que se superó la carga demográfica de la isla, dentro de las medidas se encuentra la prohibición de nuevas contrataciones e inicio de actividades económicas independientes para todas las personas que hayan ingresado en calidad de turistas o visitantes temporales.
Esta carga se determina por medio de 15 variables que evalúan la situación de riesgo que enfrenta la isla para la sustentabilidad de sus recursos. Algunas de estas tienen relación con el consumo de agua potable y tratamiento de aguas servidas, gasto eléctrico, manejo de residuos sólidos, y la capacidad de recepcionar la demanda turística.
El alcalde de Rapa Nui, Pedro Edmunds señaló que esta situación viene a perjudicar a la isla, asegurando que “el estado de latencia que acaba de decretarse sin un plan de gestión acordado por la isla y con financiamiento, viene a dañar más a la isla en vez de ayudarla”.
El estado de latencia, que estará vigente por un periodo de 12 meses en el territorio insular, se adoptó luego de que se comprobara un indice de 0,84, cifra que supera el margen de normalidad de la isla. Dentro de los indicadores que se encuentran saturados se destacan índices de pesca, ganadería y cobertura de salud.
Debido al estado en que se encuentra la isla no se podrán prorrogar los contratos a plazos fijos existentes, en tal caso los trabajadores deberán abandonar el territorio con cargo al empleador.
Por su parte, los padres e hijos mayores de edad del cónyuge de una persona rapanui, que ingresen con posterioridad a la declaración de latencia, no podrán permanecer por más de 30 días.
