Tras la formalización de Raúl González de 60 años, acusado por el femicidio de su expareja Carolina Muñoz (41) en Quintero, más detalles sobre el trágico hecho han salido a la luz pública.

Lo anterior, responde a un historial de violencia por parte de González hacia la víctima, y que tuvo como resultado final el crimen perpetrado en las afueras del Colegio Inglés de la comuna la tarde de este jueves, del cual fue testigo la hija de 6 años que ambos compartían.

De acuerdo a lo informado por La Tercera, Carolina vivía hace dos meses en una vivienda de el barrio El Búnker con su hija y abuela, luego de dejar a Raúl.

Además, de acuerdo a lo indicado por Verónica Medina -de la organización Vive Quintero-, Carolina le contó a una cercana la violencia que sufría, a quien habría comentado lo siguiente: “Me amenazaba que me iba a quemar viva”.

Asimismo, un vecino de la víctima la definió como una mujer “tranquila y reservada, no compartía mucho con nadie”.

Respecto a los antecedentes de la relación entre Carolina y Raúl, estos se remontan a 10 años atrás, cuando ella empezó a trabajar en un bar administrado por él, pasando luego a conformar una pareja y el respectivo nacimiento de la menor.

Violencia y adicciones

Al momento de referirse a la personalidad del imputado por los delitos de femicidio y uso de arma de fuego de forma injustificada en la vía pública, Verónica Medina aseguró que “tenía fama de ser un hombre violento y adicto a la cocaína”.

Por su parte, la vecina Priscila Pacheco sostuvo que “él era el típico choro con plata”, agregando que siempre tuvo la sensación de que entre la pareja había mucha violencia, pero que “nunca vimos nada”.

Volviendo al crimen que le costó la vida a la mujer de 41 años, durante la audiencia la Fiscalía entregó datos más específicos de lo ocurrido, indicando que Raúl González llegó a las afueras del Colegio Inglés con la intención de llevarse a su hija.

Debido a esto, ante la negativa de Carolina y varios forcejeos, sacó un arma de fuego y le disparó.

La fiscal Lidia Aspee apuntó que el imputado disparó “contra su cuerpo provocando dos heridas, una trans asfixiante cardíaca y otra trans asfixiante en ambos pulmones. Los hechos configuran el delito de femicidio: disparo injustificado con arma de fuego. Ambos ilícitos en grado de consumado”.

Raúl González quedó en prisión preventiva durante los 120 días que fueron estipulados para la investigación.