Los dirigentes de las juntas de vecinos de Santa Julia y Reñaca Alto en Viña del Mar se reunieron con la subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell, para pedirle que se elabore un plan para intervenir en esos sectores por los problemas de seguridad.

Han pasado un poco más de cinco semanas desde que Carla, una niña de 12 años, falleció tras recibir un impacto de bala en Reñaca Alto.

Los vecinos han realizado manifestaciones pidiendo justicia, insistiendo en que la niña no tenía nada que ver con un enfrentamiento con armas de fuego el pasado 31 de diciembre.

Los vecinos denuncian amenazas y amedrentamientos de parte de cómplices y asociados de los presuntos autores, esto considerando que los dos sospechosos del hecho quedaron en libertad sólo un par de días después del crimen, y desde entonces está en curso la investigación.

Fueron los propios habitantes del sector quienes acordaron en una reunión masiva a mediados de enero solicitar un encuentro con la subsecretaria, la que se concretó en la región Metropolitana.

Según Fabiola Gamboa, presidenta del comité vecinal de seguridad de Santa Julia, no han logrado superar el trauma de lo ocurrido.

Andrés Célis, diputado de Renovación Nacional que ayudó a los vecinos a gestionar la reunión, apuntó que entregaron un documento con antecedentes del caso y de la seguridad en la zona.

La comisión de seguridad del sector utiliza el término de “mafias” para describir lo que ocurre en Reñaca Alto y Santa Julia, criticando que cuando se trata de Carabineros faltan efectivos, infraestructura, vehículos y patrullajes.

Gamboa no se refirió a los acuerdos pactados para una intervención en la zona, pero reconoció que el compromiso de la subsecretaria es comenzar a tomar medidas en el corto plazo.