“Estatura normal, obviamente más alto que yo… No sé si era flaco o no, recuerdo casi nada de su cara”. Con estas palabras, Clara Leyton -estudiante de Historia de la Universidad de Valparaíso- intenta describir tras el shock al hombre que la atacó brutalmente en las afueras de su casa, el pasado 31 de mayo.
El hecho se remonta a las 02:00 horas de ese jueves, en el cerro Rodelillo de la comuna puerto. Allí, un hombre de unos 30 años se le acercó y comenzó a conversar. “Dijo algo sobre el clima”, recuerda la universitaria oriunda de Curicó, quien explica a BioBioChile que no podía ingresar a su domicilio, puesto que había olvidado sus llaves.
Al no recibir respuesta, rápidamente la charla se convirtió en un ataque sexual: “Estuve unos 10 minutos aproximadamente fuera de mi casa (…) y se me tiró a tocarme y tratar de darme besos”, relata.
Y añade: “Lo empujé y lo insulté”. Ante esa situación, el agresor le habría respondido que le “estaba dando color”, bajo la premisa de que “era obvio que quería pico”; procediendo a golpearla violentamente con un manotazo en la cara y azotándola contra la pared de un paradero aledaño“.
El ataque dejó a Clara inconsciente sobre el pavimento, por un periodo indeterminado, lo que sirvió para que el hombre huyera del lugar.
Luego de reincorporarse, la joven logró llamar a un amigo, quien junto a su padre acudió a prestarle ayuda y cuidarla durante esa noche. Al día siguiente, enfiló rumbo a la casa de su familia, en Curicó.
“(Mis papás) estaban afectados y frustrados, pero felices de que estuviera viva“, comenta.
En esa ciudad, la estudiante acudió a un médico particular, quien le diagnóstico una fractura en el piso de la órbita derecha, lo que la mantiene con hematomas en su rostro.
Sin venganza particular
Al ser consultada sobre si presentaría una querella por la brutal agresión de la que fue víctima, la joven respondió que se encuentra evaluando el camino que seguirá, aunque manifiesta que “al igual que yo, mi familia no busca venganza contra él en particular. Sabemos que lo que me pasó le puede pasar a cualquier mujer y culpamos sobre todo al machismo, que hace creer a los tipos que tienen algún derecho sobre nosotras”.
El caso de Clara se hizo conocido luego de que difundiera su caso mediante su cuenta de Facebook. En dicho post escribió: “No sé de dónde es, ni nada, pero sé que existe y está dando vueltas por Valparaíso. Estoy viva, sé que podría no haberlo estado hoy, casi por casualidad”.
“La razón por la que hice publica mi experiencia fue para visibilizar algo que nos pasa a nosotras a diario: el problema social y la violencia a la que estamos expuestas, más que para buscar ‘justicia legal’ o que atrapen al tipo”, señala a BBCL; añadiendo que “en el fondo el tipo que me hizo esto es cualquier hombre que cree que tiene poder sobre el cuerpo de las mujeres y que cuando nadie lo ve tiene derecho a hacer lo que se le antoja”.
“Este hombre piensa así porque la sociedad se lo ha permitido, y al momento en el que yo le negué el acceso a mi cuerpo se enfureció”, detalla; dejando en claro que el ataque no se originó tras un piropo, tal como fue difundido por otros medios comunicación.
“Hoy fue violencia brutal y física, pero cuántas veces han sido burlas, invisibilizaciones o humillaciones en contra de nosotras y de las disidencias sexuales por parte del machismo”, sentencia.
Ayuda y retorno
Por el momento, Clara no ha retornado a Valparaíso y se mantiene en la casa de sus padres en Curicó. Desde allí comenta que “igual soy consciente de que tengo que tomarme mi tiempo para estar mejor y más tranquila, no tengo miedo, pero sí dolor”.
Asimismo, precisa que diferentes organizaciones le han ofrecido ayuda, especialmente psicológica, incluyendo su universidad. Desde esta última entidad condenaron la agresión y el director de Historia UV, Pablo Aravena, informó que se le extenderá apoyo relacionado a una terapia postraumática.
“Hay un nivel amplio de violencia de la sociedad chilena (…) que claro que es preferente contra las mujeres y por eso tiene sentido el actual movimiento”, comentó el académico.
