Una comisión especial detectó falta de sustento económico, malas condiciones para los trabajadores y problemas de diseño en los trabajos de restauración de cuatro ascensores en los cerros de Valparaíso.

En la comisión, creada especialmente en la de Desarrollo Patrimonial del municipio, los arquitectos de la Municipalidad de Valparaíso presentaron una lista de deficiencias en los trabajos en los ascensores Espíritu Santo, Cordillera, Concepción y Villaseca, que actualmente están siendo reparados.

Entre los problemas detectados destaca la falta de espacios para que los maquinistas vayan al baño y almuercen.

Pedro Pablo Chadwick, director de Bienes Municipales de Valparaíso, aseveró que la seguridad, el acceso y la mecánica de los ascensores preocupan en la observación que realizó el municipio.

Los plazos en que estarían listos los trabajos han generado conflicto.

El municipio aclaró que lo más viable es que ellos decidan las fechas de apertura con una marcha blanca.

Sin embargo, esta idea es sólo una sugerencia, porque todos los ascensores tuvieron que aumentar su presupuesto. En el ascensor Espíritu Santo se deberán aplazar los tiempos de entrega y no sería raro que ocurriera lo mismo con el resto.

Daniel Morales, concejal y presidente de la comisión de Desarrollo Patrimonial, aseguró que la ausencia de funcionarios del Ministerio de Obras Públicas (MOP) complicó la discusión, porque la mayoría de los defectos provienen de las obras que ejecuta el MOP.

Otro tema de fondo es que los ascensores no son actualmente considerados “transporte público”.

El municipio pedirá acelerar el decreto del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, que estaría en trámite, para permitir una subvención que mejore su financiamiento.

Paz Undurraga, arquitecta y asesora en temas patrimoniales, explicó que para recibir recursos de la Ley Espejo del Transantiago este debe circular por paños que sean bienes nacionales de uso público.

En lo económico, la Secretaría de Planificación del municipio advirtió que los ascensores no son económicamente sustentables.

Al mes significarían un gasto de 81 millones y se proyecta que recaudarían entre arriendos y pasajes sólo 60 millones.

Actualmente, las licitaciones de los ascensores Artillería, Florida, Mariposas y Larraín fueron canceladas y sólo siete ascensores en total están funcionando.

Todo esto debería ser considerado en la iniciativa ministerial que busca entregar nueve ascensores de aquí a 2020.