Culpable de homicidio simple fue declarado el vendedor de sopaipillas que apuñaló a Camilo Navea, estudiante de técnico veterinaria que murió en abril tras una pelea originada por defender a un perro sin hogar.

Por fallo unánime los jueces desestimaron la tesis de la legítima defensa presentada por la representación del imputado, que en medio de la gresca con el joven se devolvió un par de metros hacia su carro de sopaipillas para sacar el cuchillo con el que finalmente le quitó la vida, comportamiento tildado por el fallo como de venganza.

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El defensor penal público, Humberto Ramírez, señaló que buscarán la nulidad del fallo, reclamando que el veredicto no reconoció que hubo un intercambio de agresiones.

La abogada querellante, Paula Cáceres, criticó el actuar de Carabineros, considerando que el imputado, que fue detenido la misma madrugada en que ocurrió el hecho, arrastraba una orden de detención vigente de dos meses.

La lectura de sentencia será el miércoles 20 a las 15:00 horas. El ministerio público ha solicitado 15 años de presidio efectivo.