El pasado viernes un hombre ingresó con un arma en su mochila a la Primera Comisaría de Viña del Mar y amenazó al personal policial, razón por la que fue baleado en al menos tres ocasiones.
Familiares del sujeto interpusieron una denuncia por amenazas, además evalúan instaurar una querella en la justicia militar al configurarse -lo que aseguran- fue una mala aplicación del protocolo de detención.
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El involucrado estaba prófugo tras ser sindicado presunto autor de una serie de disparos contra una mujer embarazada en el sector de Glorias Navales. Fue trasladado a la comisaría para proseguir un control de identidad luego que se negara a mostrar sus pertenencias en la vía pública, mientras funcionarios allanaban su domicilio.
Luego de atacar a Carabineros, efectivos del GOPE se trasladaron al recinto para reducirlo, impactándolo en al menos 3 ocasiones, ante lo cual fue llevado al Hospital Gustavo Fricke, donde se mantiene grave, razón por la cual no ha sido formalizado por el Ministerio Público, a la espera de una mejoría en su estado de salud.
Su hermano, quien llegó hasta la Fiscalía de Viña del Mar, aseguró que Carabineros efectuó mal el procedimiento, pues -a su juicio-, se hubiese evitado la balacera si le quitaban el bolso donde llevaba el arma de fuego.
Por su parte, el coronel de la V Zona de Carabineros, Nelson Valenzuela, aseguró que cualquier ciudadano puede interponer las acciones que les parezcan pertinentes y los tribunales determinarán si es a lugar o no. Sobre un potencial sumario, el oficial agregó que permanentemente se encuentran evaluando sus procedimientos.
En tanto desde la policía uniformada, anunciaron que se interpondrá una querella criminal por el delito de homicidio frustrado contra policías en servicio, lo cual se sumaría a lo solicitado por el Ministerio Público, por porte ilegal de armas, porte de droga y también homicidio frustrado.
