Como un “engaño” calificó el vocero del Movimiento Una Victoria para Viña la idea manifestada por el municipio de la Ciudad Jardín la de evaluar la realización una consulta ciudadana en el mes de marzo, a fin de determinar el futuro de los cuestionados carros de tracción animal.

Dando cuenta de un nulo avance con las autoridades y la solicitud de un amparo ante el Concejo de Transparencia, luego que el municipio se negara a dar detalles de los acuerdos en esta materia, Juan Carlos Oróstica, vocero de Una Victoria para Viña y presidente de AnimaLex desestimó los anuncios realizados por el ente comunal en materia de llevar una consulta ciudadana durante marzo, en vista de un año electoral en que no se pueden realizar plebiscitos ni este tipo de actos antes de abril.

Dificultades que se suman a una serie de condiciones que -según el dirigente- hablan de la “falta de voluntad política de las autoridades comunales” y hacen de este proceso un engaño de las autoridades, al tratarse de una consulta no vinculante que para serlo requeriría el voto de 150 mil personas, es decir, mas del doble de viñamarinos que participaron de las elecciones municipales de 2016.

En marzo, diversas autoridades del municipio de Viña del Mar deberán establecer las condiciones de una consulta ciudadana que, según puntualizó Oróstica, no responde a las demandas establecidas por los grupos animalistas en materia de sustitución de la tracción animal por un coche mecánico y amigable con el medio ambiente.

El dirigente indicó que las autoridades sólo han velado por la situación vial de la comuna y aseguró que por el momento no han contado con los espacios necesarios para dar cuenta de un proyecto amigable con la ciudad, tampoco que cuente con estaciones fotovoltaicas, implicando un ahorro cercano a $3 millones al año.