Tras el informe final del Instituto de Fomento Pesquero (IFOP) que reconfirma presencia de metales pesados en la bahía de Quintero y productos del mar, ambientalistas llaman al Ministerio de Salud a actuar de inmediato con medidas que impidan que esta contaminación dañe a la población.

Alta concentración de metales en el sector de Loncura que fue mostró el informe titulado “Determinación de los impactos en los recursos hidrobiológicos y en los ecosistemas marinos presentes en el área de influencia del derrame de hidrocarburo de Bahía Quintero, V Región”, impulsado por la institución.

Según la publicación, tanto los organismos bentónicos analizados como los crustáceos carroñeros y los moluscos gastrópodos carnívoros mantienen acumulación de metales pesados en sus tejidos, entre ellos el arsénico.

Andrés León, de la agrupación Dunas de Ritoque, dijo que la situación es preocupante ya que esta fue advertida meses atrás cuando se conocieron los resultados. A lo anterior agregó que no se puede seguir exponiendo a la población al consumo de productos contaminados, por lo que llamó al Ministerio de Salud a tomar medidas, analizando a fondo la situación para determinar si estos productos se pueden o no consumir.

Sobre las instancias participativas, como el Programa de Recuperación Ambiental y Social de Quintero y Puchuncaví (PRAS) o la Gobernanza, no aseguran la salud de la población debido a que se requieren medidas inmediatas.

Por su parte, el intendente Gabriel Aldoney salió al paso del llamado, calificándolo como de una postura extrema que no reflejaría la realidad. Según la máxima autoridad, si existiera certeza en que esta situación podría causar algún daño a la población se tomarían las medidas necesarias.

Tan seguro está que declaró estar seguro que los productos no son nocivos por lo que afirmó estar dispuesto a consumirlos sin problemas.

En el Municipio de Puchuncaví también existe preocupación en conocer los resultados de este estudio, por lo que acudieron nuevamente a solicitar de manera formal los resultados hasta la Subsecretaría de Pesca.

Recordemos que la investigación tuvo un costo de 350 millones de pesos y se inició en 2015, siendo parte de las acciones insertas en el denominado Plan de Ayuda e Inversión Pública para Quintero-Puchuncavi (Paip). Este consideró una inversión de 42 mil millones de pesos en medidas de corto, mediano y largo plazo en las comunas de Quintero y Puchuncaví.