Una muerte en silencio ataca a entre dos a 3 caballos por semana en Isla de Pascua a causa del la ingesta por parte de estos animales del Lupino o “Chocho”, como lo llaman en la isla; especie botánica que fue introducida en los años ’70 por Corporación Nacional Forestal, Conaf, a Rapa Nui con el fin detener el avance de la erosión.

Son 35 años donde autoridad alguna, pese a reiterados llamados, no ha dado respuesta a este problema, dijo el alcalde de la isla Pedro Edmunds Paoa; quien da cuenta que en 20 años a la cabeza del municipio, ha visto nulo actuar para mitigar la situación.

Al respecto, afirmó, no se hizo un estudio o no se sabía los efectos que causaría cuando se introdujo la planta, viendo con dificultad la erradicación de la especie. Haciendo una analogia, “es más fácil erradicar el mosquito del dengue que eliminar el lupino”, dijo.

El alcalde detalló que a raíz de una sospecha de un médico canadiense, que llegó a la isla en 1991, estudió el tema en su país y les confirmó que lo que estaba afectando a particularmente a los caballos era el Lupino.

Planta que en periodo de floración es muy tóxica, dijo, y afecta directamente el sistema nervioso de los caballos, que se van deteriorando a tal grado que pierden estabilidad, se desorientan, no saben si comen, beben agua o no, falleciendo finalmente por inanición.

Respecto de esta situación, Radio Bío Bío se contactó con Conaf y SAG para consultar cómo se ha abordado el tema y si hay medidas tendientes a dar solución a este problema, sin embargo, hasta el cierre de esta edición no ha tenido respuesta de lo solicitado.