Con una orden de demolición de todas las obras construidas, el Juzgado de Letras en lo Civil de Casablanca acogió la denuncia en contra de una empresa inmobiliaria que comenzó a ejecutar trabajos en la playa de Tunquén sobre una serie de piezas arqueológicas, que estaban previamente georeferenciadas por el Consejo de Monumentos Nacionales.

El abogado Christian Lucero explicó que el fallo de la justicia es contundente y obliga a no sólo suspender los trabajos, sino que a demoler lo ya construido y que dañó el sitio arqueológico.

Por su parte, el senador Francisco Chahuán afirmó que siempre sostuvo que un proyecto emplazado en un sector aledaño a un Santuario de la Naturaleza debe someterse al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, más aún si está ubicado en una zona de interés arqueológico.

En ese sentido, efectuó un llamado a las autoridades regionales a agilizar la licitación del estudio de línea de bases del lugar, destinado a otorgar la protección total a la playa, dunas y roqueríos, con fondos que ya fueron aprobados por el Gobierno Regional.