Los resultados de un estudio realizado por la Asociación de Investigadores de Mercado de Chile (AIM), el cual clasificó los grupos socioeconómicos de los habitantes del país, arrojaron que tres regiones concentran el mayor porcentaje de hogares pertenecientes a la categoría más alta: el segmento AB.

En primer lugar de la lista quedó la región Metropolitana, con un 19,5% de hogares con alta concentración de riqueza; seguido de la región de Tarapacá, con un 17,2% de los mismos; y de la región de Aysén, con el 16%.

Según indicó Diario El Mercurio, la medición y clasificación se realizó, por primera vez, usando información de acceso público, como datos de la Encuesta Casen de 2015 y de la Encuesta de Presupuestos Familiares.

Por el contrario, al otro lado del espectro quedaron las regiones de Los Ríos, con un 18,4% de hogares en el segmento E, el más bajo. Penúltima quedó la región del Bío Bío, con un 18,5%. La Araucanía, en tanto, obtuvo la mayor cantidad de hogares con menor concentración de riqueza, con un 23,3%.

De esta forma, estas tres regiones acumularon el porcentaje de hogares en el segmento más bajo a nivel nacional.

Clasificación segmentos AB y E

¿Pero, qué requisitos deben cumplir los hogares del país para terminar en alguno de estos dos segmentos?

Aquellas familias que viven en hogares de los deciles más altos perciben sueldos que, en promedio, superan los 6,4 millones mensuales y quienes se encargan de solventarlos son, en su mayoría, profesionales universitarios con estudios de posgrado.

A lo anterior se suma que todos son directivos de “alto nivel”, de los cuales un 89% tiene previsión en isapres, 92% posee tarjetas de crédito y un 78% vehículo particular.

Por el contrario, los ingresos totales promedio de quienes se encargan de administrar un hogar segmento E no superan los 330 mil pesos, un 54% no llegó a la enseñanza media, el 95% pertenece a Fonasa, el 5% tiene tarjeta de crédito y sólo un 14% posee vehículo.

Finalmente, los hogares del segmento D se quedaron con el primer lugar a nivel nacional, con un 37%.

En un hogar de este segmento se perciben, en promedio, 562 mil pesos de sueldo, más de la mitad no persevera en estudios universitarios y 95% de quienes viven en éstos pertenecen a los segmentos A y B de Fonasa.

Además, la mayoría trabaja en ocupaciones que no requieren educación formal y el 74% tiene un celular prepago.