Un niño de 5 años murió la tarde de este martes tras caerse accidentalmente a una piscina en la comuna de Graneros, región de O’Higgins.

Se trata de un menor que previo al accidente se encontraba compartiendo junto a familiares en un domicilio particular de la ciudad.

Al percatarse de la situación, sus cercanos le realizaron los primeros auxilios para posteriormente trasladarlo hasta el Hospital de Graneros, recinto donde se constató el deceso.

Enterado de lo ocurrido, el fiscal de turno instruyó diligencias a la Brigada de Homicidios (BH) y al Laboratorio de Criminalística (Lacrim) de la PDI para indagar las circunstancias en que se produjo la muerte.

El comisario Carlos Gálvez Madrid, jefe de la BH rancagüina, indicó que “en las indagaciones se logró establecer con el reconocimiento externo policial que el cadáver no presentaba lesiones atribuibles a terceras personas, manteniendo signos de asfixia por sumersión”.

Finalmente el Ministerio Público ordenó que el cuerpo del pequeño fuera entregado a sus familiares, con la finalidad de continuar con el proceso para sepultarlo.