Continúan apareciendo más antecedentes sobre el perfil de Osvaldo Luis Campos Azócar, el médico veterinario que este domingo mató a balazos a dos trabajadores del Casino Monticello de la comuna de Mostazal tras una millonaria pérdida en la sala de juegos.
Un amplio prontuario policial revela parte de la personalidad de este médico veterinario que tras días de juego, asesinó a balazos a dos trabajadores, dejó heridos a otros 4 funcionarios, para luego suicidarse con una inyección fatal.
Riña en la vía pública, cuasidelito de lesiones, amenazas simples, lesiones menos graves, estafas, amenazas de atentado y detención por retener a menores por el no pago de una consulta son parte del extenso historial policial de Osvaldo Campos, quien además había sido expulsado del Colegio de Veterinarios producto de una serie de denuncias por maltrato animal.
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A la espera de que concluyan los peritajes del Servicio Médico Legal de Rancagua, Carabineros ya pudo establecer un perfil del pistolero. Según Paulina Fuenzalida, sicóloga del OS-9 de la Dirección de Investigación Criminal de Carabineros, la actuación de Osvaldo Campos podría haber sido un acto derivado de una personalidad narcisista, ludópata, pero con altos rasgos psicopáticos.
Campos también presentaba denuncias de violencia intrafamiliar contra sus exparejas. Olga, quien mantuvo una relación amorosa con él, señaló que era un hombre violento que contaba con una lista de personas de quienes quería vengarse.
“Era una persona psiquiátrica con bipolaridad. Me dijo ‘la muerte mía va a ser así con una jeringa, no con una pistola, porque yo a la cárcel no me voy’. En la lista aparecía mi hijo y aparecía yo, el día que yo hablara atentaría contra nosotros”, reveló.
Quienes también se refirieron a aspectos de su personalidad fueron vecinos de Maipú, comuna donde mantenía la Clínica Veterinaria. Las parvularias de un jardín infantil ubicado a su costado indicaron que él incluso insultaba a los niños cuando hacían ruido o en otras situaciones que le molestaran.
Durante esta jornada fueron entregados los cuerpos del Crupier de la ruleta, Óscar Reyes Valenzuela, y de Carolina Carreño Ávila. De esta última su esposo Felipe Monje y su hermano Luis Carreño expresaron la frustración y molestia por las pocas medidas de seguridad del casino.
La superintendenta de Casinos de Juegos, Vivien Villagrán, indicó que las posibles sanciones al casino Monticello parten desde “distintos tipos de sanciones, desde amonestación verbal a multas en dinero y en caso extremo, incluso la revocación de licencia de casino“.
Finalmente, las cuatro personas lesionadas permanecen internadas en el Hospital Regional de Rancagua con lesiones graves, pero fuera de riesgo vital.
