La Asociación Nacional de Oficiales Penitenciarios salió al paso de las acusaciones por parte de la Defensoría Regional de O’Higgins a raíz de una presunta demora para dejar en libertad a una mujer acusada del parricidio de su hija de un año en Rengo tras administrarle Tramadol.
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Según se denunció, gendarmes habrían desatendido sus funciones durante el partido de la Selección Chilena por la Copa Confederaciones. Los familiares de la imputada habrían esperado más de cuatro horas en las afueras del penal debido a que al interior no había quien firmara la libertad de la mujer.
Ante ello, el teniente coronel Álvaro Millanao Valenzuela sostuvo que les parece “preocupante” la acusación por parte del defensor regional en contra de personal de Gendarmería y la jefatura del establecimiento penitenciario aludido.
En esa misma línea aclaró que “se concretaron los protocolos que se aplican a la generalidad de las personas que se dejan en libertad”, procedimiento que además se habría llevado a cabo dentro del rango y tiempo establecido para ello.
Para el también secretario general de la Asociación Nacional de Oficiales Penitenciarios, muy por el contrario a las acusaciones, “tenemos órdenes para reforzar la seguridad del establecimiento y aplicar protocolos necesarios para garantizar la seguridad”.
Millanao sostuvo además que toda la información puede ser corroborada mediante los documentos donde se registran las diligencias realizada, por lo que reiteró que les parece preocupante la denuncia por parte de la Defensoría, ya que “podrían haberse interiorizado” de lo ocurrido.
“No se cometió ninguna irregularidad ni vulneración al derecho de la ciudadana”, finalizó diciendo el teniente coronel de Gendarmería.
