Al parecer abril quedará hasta el momento como un hito para todo el equipo médico y de especialistas de la Unidad de Pacientes Críticos (UPC) del Hospital Clínico de Magallanes (HCM), pensando que fue un mes bastante complicado, con aeroevacuados y con el casi colapso de la infraestructura crítica de la región más austral del país.

De eso, hoy quedan lecciones aprendidas que están llevando, hasta el momento, a tener una tensa tranquilidad al interior de la UPC del recinto.

Esto porque desde que comenzó mayo, las cifras de ingresos a la unidad han ido a la baja, misma situación en los pacientes que necesitan soporte mecánico de ventilación.

Para el jefe de la UPC del HCM, doctor Christos Varnavas, la situación da una tranquilidad, aunque confirma que “no es momento para relajos”.

“Aún hay que ser prudentes en las proyecciones, dado que estamos en la etapa post cuarentena y cómo se dice el proceso es dinámico y debemos estar preparados a lo que suceda en las próximas semanas”, comentó Varnavas, quien agregó que “no podemos bajar la guardia ahora, no sabemos qué va pasar en los próximos días, se nos acerca el invierno y no sabemos qué es lo que puede pasar en las próximas semanas, debemos estar atentos y preparados”.

Una de las preocupaciones que se ha visto a nivel central es el colapso que se está evidenciando en varios hospitales, sobre todo de la región Metropolitana, lo que ha llevado a evacuar pacientes y solicitar el retornos de implementos como ventiladores mecánicos desde otras regiones.

Ante la posibilidad de algún ingreso desde Santiago hacía la región y saber sobre todo si la UPC está con capacidad para poder soportar un traslado, Varnavas comentó que “en estos momentos, dada la disponibilidad de cupos, sí, con la salvedad que somos una zona aislada geográficamente y la capacidad de derivar pacientes se va a ver muy tensionada si la demanda de pacientes críticos aumenta”.