De la peor manera terminó un carrete entre amigos el sábado pasado en el pasaje Cerro York con Teniente Serrano, en la población General del Canto de Punta Arenas. Pasadas las 8:00 de la mañana, un grupo de adultos consumía alcohol y cantaba karaoke a gran volumen. Aquello generó la molestia de un vecino, Julio César Antiquera Yutronic, que vive en la vivienda contigua.
De acuerdo a Fiscalía, golpeó la puerta para pedirles que bajaran el volumen y amenazó con acuchillar a la propietaria.
Ante los gritos en el antejardín, desde la vivienda salieron tres familiares de ella: Bastián Bahamonde Bustamante y sus primos Cristóbal Oyarzo Bahamonde y Jorge Oyarzo Bahamonde. Se encontraban en estado de ebriedad, por lo que el vecino molesto se retiró a su domicilio.
Pero estos lo siguieron hasta afuera. Allí comenzó un forcejeo y Bastián sacó desde su base una reja de fierro. Al levantarla no se percató de su acción y pasó a golpear a su primo Jorge en la frente.
Acto seguido, ingresó al antejardín del vecino y lo golpeó. Tras ello cayó al piso, desde donde comenzó a defenderse.
La escena fue presenciada por una vecina, quien intervino para que terminaran de pelear, ya que hacia el lugar se dirigía personal de Carabineros.
Cuando se retiraban de la escena, se percataron que Jorge se encontraba en el piso inconsciente y ensangrentado. Incluso comenzó a convulsionar. Lo llevaron hasta el domicilio de la fiesta para luego pedir auxilio al Sistema de Atención Médica de Urgencia (SAMU).
Luego llegó personal de Carabineros, quién se llevó a todos los involucrados a la comisaría para un control de identidad. En tanto, el SAMU atendió al hombre herido y lo llevó al Hospital Clínico de Magallanes, donde permanece hospitalizado de extrema gravedad en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) con un TEC y una herida occipital en la cabeza.
Debido a todo lo anterior, el vecino de la vivienda contigua fue formalizado por el delito de amenazas. Por su parte, Bastián, el primo de la víctima -que lo golpeó con la reja- fue formalizado por el delito de lesiones graves gravísimas. Y junto a Cristóbal se les formalizó por los delitos de lesiones menos graves y violación de morada violenta, por haber ingresado a la vivienda del vecino que reclamaba.
Eso sí, todos los imputados recuperaron su libertad y quedaron con diferentes medidas cautelares, mientras que el plazo para el cierre de la investigación se fijó en 90 días.
