Debido a los reclamos del alcalde de Punta Arenas, Claudio Radonic, el Instituto Antártico Chileno se puso en contacto con la Embajada de Brasil, por desechos pertenecientes a ese país que hace tres años permanecen en una empresa de la ciudad.

Los tres contenedores con desechos provenientes de la incendiada base de la Armada Brasileña en la Antártica llegaron a la ciudad luego de ser transportados para ser procesados por la empresa de reciclaje Cometsur.

Radonic sostuvo que no se han comunicado con las empresas a cargo, ni con la embajada de Brasil, puesto que el Instituto Antártico Chileno es el encargado de mediar con las bases en esa zona. Además, señaló que a raíz de este conflicto entre privados, desde la municipalidad buscaran promover el reciclaje de los desechos producidos en la ciudad.

La autoridad agregó que este problema obedece a un conflicto entre la agencia naviera que Brasil contrató para hacerse cargo de los desechos y la empresa que ésta subcontrató y que aún conserva los contenedores en la ciudad.

El gerente general de Cometsur, Claudio Pinto, sostuvo que antes de recibir los contenedores, la empresa solicitó registros fotográficos para evaluar dónde serían procesados, pero que al momento de la recepción los desechos obedecían a características diferentes.

Por su parte, la Marina de Brasil señaló que desde el inicio del conflicto han acompañado las negociaciones entre las empresas involucradas, para dar solución a esta acumulación y conservación del material proveniente de la base.

La entidad señaló, además, que puso un navío a disposición para el retiro de los residuos, lo que dependerá del acuerdo al que lleguen entre las empresas involucradas.