El 26 de julio se realizó la Comisión de Evaluación Ambiental en la que se escribiría una nuevo capítulo en la historia de Isla Riesco: Ese día se aprobó el uso de tronaduras para la extracción en la Mina Invierno.

Pero no sólo eso generó reacciones entre los detractores de este proyecto energético, ya que el Servicio de Evaluación Ambiental de Magallanes, seis meses atrás, decidió negar la participación ciudadana en esa reunión.

Por este motivo, la agrupación Alerta Isla Riesco, encabezada por su representante nacional Ana Stipicic, decidió poner un recurso en la Corte de Apelaciones de Santiago para permitir la reposición de participación ciudadana.

El pasado viernes se enteraron por la prensa que la Octava Sala del tribunal, por fallo unánime, rechazó el recurso puesto en contra del director ejecutivo del SEA, Jorge Troncoso. Ante esto, Ana Stipicic anunció que la próxima semana acudirán a la Corte Suprema para lograr su anulación.

Ezio Costa, director ejecutivo de FIMA, organización de derecho ambiental, fue crítico con el fallo de la Corte de Apelaciones y explicó los errores en los que -a su juicio- incurrió el tribunal.

Costa argumentó que la corte sólo analizó cuestiones formales y que no se refirió a como el SEA incumplió con la legalidad al rechazar la participación ciudadana.

Ante estas críticas, el seremi de Medio Ambiente de Magallanes, Juan Marcos Henríquez, aseguró que la decisión del Servicio de Evaluación Ambiental está dentro de lo legal.

En diciembre comenzará a usarse el método de tronaduras en Mina Invierno para la extracción de carbón.

Si la Corte Suprema aprueba el recurso, desde las agrupaciones ambientalistas señalan que podría declararse inexistente el permiso para las tronaduras, hasta que se repita una nueva comisión, que esta vez si cuente con la intervención de la comunidad.