Gran expectación generó la reciente inauguración de la restauración del Teatro Cervantes en Valdivia, evento al que asistieron unos 800 invitados, entre autoridades locales y regionales y dirigentes de la sociedad civil.

Sin embargo, habitantes y vecinos de la zona quedaron fuera del evento.

El corte de calles, la instalación de una alfombra roja y de luminaria especial llamaron la atención de los valdivianos que se encontraban cercanos al edificio que tiene su entrada principal por calle Chacabuco, quienes se acercaron para observar el evento desde las afueras.

Pese a que ha sido denominado como un espacio para el desarrollo del arte y las culturas, que se mantendrá disponible para toda la comunidad, hubo personas que sabían de la inauguración y que lamentaron no poder asistir, por no contar con una invitación.

Es el caso de Luz Henríquez, quien observó cómo ingresaban las autoridades al remozado recinto. Según señaló, le hubiese gustado que la invitación fuera extendida a la comunidad.

Un grupo de estudiantes, que se quedaron a mirar desde la valla papal instalada en la intersección de calles Chacabuco con O’Higgins, también lamentaron que la invitación fuera para ciertas personas.

También cuestionaron que no se difundiera de manera masiva la reapertura del recinto.

Pese a los cuestionamientos, el evento estuvo marcado por su valioso aporte cultural.

El planto fuerte fue la brillante presentación de la soprano Verónica Villarroel, quien estuvo acompañada por Maribel Villarroel y Pedro Espinoza, además de la Orquesta Filarmónica de Los Ríos, dirigida por Alejandra Urrutia durante las casi dos horas que duró el show que mezcló canto y teatralidad.

Finalizada su interpretación, la soprano aprovechó la instancia para dar las gracias por el “rescate” del edificio y dijo esperar que más actividades culturales se sigan desarrollando en la ciudad.

Sin duda el evento estuvo marcado por la elegancia de los artistas e invitados, pero también la del remozado recinto que en su interior está pintando de impecable color blanco, adornado su escenario con flores del mismo tono, destacando así su gran telón rojo.

Durante el domingo, a partir de las 19:00 horas, se repitió el espectáculo ofrecido el sábado, pero esta vez fueron 350 los invitados, quienes recibieron una entrada otorgada por los Consejeros Regionales.

De momento no se han entregado detalles respecto de próximos eventos a realizarse en el teatro, que cuenta con capacidad para 827 personas y espacios de exposición de antiguas maquinarias cinematrográficas.