El ministro en visita de causas de Derechos Humanos de las Cortes de Temuco, Valdivia, Puerto Montt y Coyhaique, Álvaro Mesa, determinó que en el marco de la “Operación Peineta”, el 7 de noviembre de 1973, el estudiante de la carrera de Electrónica del Instituto Profesional Nuevo Mundo de Santiago fue detenido por boinas negras en la casa de familiares en Futrono, a quienes había ido a visitar.

Luego de ello fue trasladado en helicóptero a Panguipulli, hasta un recinto que albergaba a presos políticos, donde el entonces teniente Cristián Labbé Galilea, fuertemente armado y con ropa de camuflaje, lo amenazó con un corvo de que le cortaría el cuello, tras indicarle a Cohen que bajara la vista, según la resolución del ministro Mesa.

Tras dos días de aquel episodio, el estudiante fue sacado de la celda con los ojos vendados y un saco a modo de capucha, amarrado de pies y manos, seguido de otras actuaciones.

En ese contexto, Harry Cohen fue sometido a descargas eléctricas en sus tobillos y muñecas, mientras era interrogado, determinado el ministro acusar a Labbé Galilea por tales apremios, lo que fue valorado por el abogado querellante, Roberto Ávila.

Lo que resta ahora es la conformación de un plenario que duraría unos 20 días, para discutir, además la adhesión que el querellante hará a la acusación y la demanda civil que, dijo Ávila, probablemente van a intervenir por lo ocurrido con su representado.