En forma unánime la Corte de Apelaciones de Valdivia confirmó el fallo del Primer Juzgado Civil de esta ciudad, que acogió una demanda de indemnización de perjuicios interpuesta por María Fernández Ortiz, en contra del Tercer Tribunal Ambiental de Valdivia, en donde la mujer fue la secretaria de la instancia y la despidieron de manera injustificada.
Según el fallo, existió daño moral que debe ser resarcido producto del despido injustificado del que fue victima y que conllevó consecuencias traumáticas y post traumáticas en ella y su grupo familiar, que se vieron afectados no tan solo sicológicamente y moralmente sino también en su patrimonio.
El escrito indica que la profesional firmó contrato con el Tercer Tribunal Ambiental el 10 de marzo de 2014. Para eso debió renunciar al Poder Judicial y al cargo de jueza en Iquique, el que desempeñaba desde 2004.
Al poco andar, en Valdivia vio mermado y menoscabado su trabajo, siendo pasada a llevar en tareas propias de su cargo, hasta que en una reunión extraordinaria del 29 de agosto de 2014 presidida por el presidente del Tercer Tribunal Ambiental, ministro Michael Hantke, la exhortaron a renunciar sin dar mayores argumentos.
Esa noticia provocó que la mujer se descompensara en el mismo Tribunal y posteriormente, concurriera al puente Cruces lanzándose desde altura, salvando milagrosamente y siendo diagnosticada en el Hospital con un trastorno depresivo severo.
Sus hijos finalmente demandaron al Tribunal Ambiental.
El Tribunal de Alzada rechazó un recurso de casación que interpuso el Tercer Tribunal Ambiental, y le ordenó pagar 70 millones a la ex secretaria del tribunal por ser víctima directa y 15 millones de pesos a cada uno de sus tres hijos, como víctimas por repercusión.
Radio Bío Bío consultó y desde el Tercer Tribunal Ambiental declinaron referirse al tema.
