Gendarmes piden reforzar con urgencia las medidas de seguridad de la cárcel de Osorno, ante las fugas que se han registrado en un edificio que data del año 1943. Lo anterior ocurre en momentos que funcionarios penitenciarios esperan reunirse con el director nacional de gendarmería para solicitar el refuerzo de la actual dotación.

De esta manera, fue el recién asumido alcalde de Osorno, Jaime Bertín, quien calificó de grave el escenario que expone un edificio que desde noviembre del 2020 a la fecha suma 6 fugas de internos.

La autoridad comunal sostuvo que, si es necesario, el municipio está disponible para ayudar en el refuerzo de las medidas de seguridad.

Las declaraciones se dan en momentos que funcionarios del frente penitenciario, representados por el dirigente Cesar Villarroel, esperan que la Dirección Nacional de Gendarmería les reciba y puedan exponer la situación del penal ubicado en pleno radio urbano de la comuna, y de ello resulte un refuerzo en materia de dotación

Respecto a la cantidad de funcionarios, Villarroel, sostiene que se optimiza una dotación, para enfrentar los desafíos diarios en el penal local.

Lo cierto es que se trata de un recinto penitenciario que tiene 81 años y donde los funcionarios piden reforzar la estructura y también la dotación, tema que esperan abordar en un encuentro con el director nacional de gendarmería