Más de 15 meses han transcurrido desde que la justicia solicitara la extradición de Zachary Ward, exejecutivo de la neozelandesa Manuka, que fue formalizado en ausencia por el maltrato y matanza de entre 600 a 1.500 terneros machos durante los años 2012 y 2013, en un fundo de la empresa en Puerto Octay, en la región de Los Lagos.
Sin embargo, a la fecha, la justicia del país oceánico no ha respondido, por lo que el diputado denunciante de la causa, Fidel Espinoza, emplazó a la embajadora de Nueva Zelanda en Chile, Linda Te Puni, para que se haga parte y solicite agilizar la extradición del autor de la mayor matanza animal.
El parlamentario agregó que el exejecutivo no sólo actuó de manera brutal con los animales sino también con los trabajadores, a quienes habría obligado a cometer dichos actos.
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Espinoza calificó como “una falta de respeto del gobierno de Nueva Zelanda que tras un largo periodo desde la solicitud formal de la justicia chilena y el Ministerio de Relaciones Exteriores para extraditar al ciudadano de ese país, aún no exista ningún tipo de respuesta”.