Tras el término de contrato con la empresa Dipralsa, encargada de armar las canastas estudiantiles, el Gobierno garantizó la entrega del servicio de alimentación para los estudiantes que reciben el beneficio en la región de Los Lagos.

Las razones que llevaron a terminar el contrato entre ambas partes se relaciona a deficiencias en la calidad de los productos, así como número de éstos, indicó el Gobierno en su momento.

La directora regional de Junaeb, Sarita Cárcamo, confirmó el término de contrato, señalando que ahora se inicia una nueva licitación para adjudicar a una de las 28 empresas prestadoras de alimentación del país la próxima semana.

Además, anunció que debido a la gravedad en el servicio prestado por la compañía, se ejecutaron las boletas de garantías establecidas en el contrato por un monto de 2.381 millones de pesos para asegurar la prestación a los estudiantes.

En la misma línea, el intendente de Los Lagos, Harry Jürgensen aseguró que el beneficio se seguirá entregando.

“Las comunidades escolares pueden estar absolutamente tranquilas, porque les doy la plena seguridad de que pese a la suspensión de este contrato con Dipralsa, Junaeb debe implementar las medidas necesarias para garantizar la continuidad del servicio”, indicó.

Asimismo, se entregó la seguridad a las 2.543 manipuladoras de alimentos que trabajan para Dipralsa, ya que en las nuevas bases de licitación existe la exigencia de absorber el 100% de los trabajadores.