Trabajadoras de Casas Particulares en Osorno, en la región de Los Lagos, exigen al Gobierno y a parlamentarios incluirlas en el Fondo Solidario de Cesantía, implementar una renta básica de emergencia y velar para que sus jornadas laboral se ajusten a la ley.

Las repercusiones de la crisis sanitaria ha escalado a distintos sectores, evidenciando vacíos legales durante las cuarentenas, que en el caso de las asesoras del hogar han quedado expuestas a las medidas que han determinado los empleadores o corren el riesgo de quedar sin empleo.

Así lo indica Catalina Solís, presidenta de la Asociación Nacional de Empleadas de Casas Particulares Osorno (ANECAP), quien dio cuenta de la complicada situación que están atravesando.

Según especifican desde el gremio, si bien el Gobierno promulgó recientemente la Ley 21.227 que faculta el acceso a prestaciones del Seguro de Desempleo en circunstancias excepcionales, deja fuera a las trabajadoras de casas particulares.

Situación que estima no reconoce sus derechos, por lo que piden su incorporación inmediata al Fondo Solidario de Cesantía, y que se implemente una Renta Básica de Emergencia junto a fiscalización a los empleadores.