El único detenido por el incendio que afectó la centenaria iglesia San Francisco de Ancud en Chiloé será trasladado a un psiquiátrico debido a que la defensa presentó indicios de que podría ser inimputable ante la ley por su condición mental.
Fue la jueza María Angélica Islas quien decidió suspender el procedimiento mientras no se tengan los exámenes psiquiátricos que determinen si el detenido es o no imputable, a través de procedimientos que fueron encargados al Servicio Médico Legal de Puerto Montt.
El sujeto de 24 años cuenta con antecedentes por daños a un edificio gubernamental de Valparaíso, y pudo ser identificado por la policía gracias a cámaras de vigilancia ubicadas en las cercanías del templo.
El fiscal, Javier Calisto, expresó que buscan acreditar los delitos de incendio intencional y lesiones.
“La figura de incendio que señalé en esta edificación que sabemos las características que tiene digamos, delito por el cual la ley establece penas de presidio mayor y también yo agregué la situación de las lesiones. En definitiva (…) el párroco, que resultó con lesiones de mediana gravedad”, señaló.
Asimismo, agregó que “el tribunal primero estableció de acuerdo a los antecedentes que aportó la defensa, que el imputado necesitaba hacerse determinados informes para ver su situación de salud mental y decretó lo que se conoce como suspensión del procedimiento”.
El defensor del joven, Humberto Ramírez, comentó que están conformes con la suspensión del proceso, mientras su representado es sometido a exámenes psiquiátricos.
“Efectivamente el procedimiento se suspendió. Presentamos antecedentes que nosotros entendemos que son suficientes para permitir presumir que nuestro representado, o que al menos existen presunciones de que podría ser inimputable”, aseguró.
Además, agregó que se encuentra “desde esa perspectiva, sí, conforme. Ahora, desde la perspectiva de la internación provisional decretada, no, no estamos conformes ¿y por qué no estamos conformes?. No estamos conformes, primero que todo, porque la verdad es que tenemos serias dudas respecto de la participación de nuestro representado”.
Javiera Oyarzún, abogada de la Intendencia que también se sumó a la querella, dijo que esperaban la prisión preventiva del detenido.
“En estricto rigor nosotros queríamos como parte querellante, era que se decretara la prisión preventiva del imputado, toda vez que existen antecedentes que permiten acreditar efectivamente la existencia del hecho, como del delito de incendio y la participación del imputado en él”, señaló.
Agregó que “la defensa aportó debidamente antecedentes que permitirían presumir que el imputado adolece alguna enfermedad mental que a nuestro juicio, sin embargo, no lo constituye en un enajenado mental de forma que sea inimputable para someterse a un juicio penal”.
Por orden de la magistrada a cargo de la formalización, el sujeto será internado provisoriamente en el psiquiátrico de Puerto Montt, con resguardo de Gendarmería.
