Este lunes se realizó un nuevo Comité Operativo de Emergencia, COE, en Osorno para tratar la crisis del agua que sufrió la ciudad por el derrame de petróleo, en la planta de procesamiento de agua potable de Essal.
En la instancia, el intendente de Los Lagos, Harry Jürgensen, evitó referirse directamente a la posibilidad de finalizar la concesión de la empresa en la región, pero manifestó que “aquello que es importante está siendo investigado en distintas líneas”.
Si bien, no descartó de plano el fin de la concesión de la sanitaria, fue enfático en sostener que esto sería una consecuencia, pero aseguró que serían otros los organismos que determinarán eso y las consecuencias para la ciudad.
En este sentido, el jefe regional expresó que ahora lo más importante es “cuidar la vida de las personas y darles agua de calidad”, lo que a su parecer ya se ha logrado.
“El agua que hoy reciben por red es agua potable, absolutamente certificada por el Instituto de Salud Pública“, sentenció el intendente de Los Lagos.
La autoridad además solicitó que no se pongan más en duda la calidad del suministro -que ya fue restablecido- puesto que genera alarma en la población.
Tras la emergencia, Jürgensen, indicó que esto generará un cambio completo en los procedimientos de la empresa Essal, responsable de la contaminación y el extenso corte de agua.
“Lo que hemos vivido revela que hay una irresponsabilidad de la sanitaria”, indicó el intendente, y agregó que la empresa está en condición de “fragilidad” por la forma de reaccionar que tuvo en la emergencia.
Finalmente, el líder regional dio por superada la crisis en Osorno, y manifestó que tras los reportes de los diversos organismos de emergencia, el agua de la ciudad es totalmente potable.
Por otro lado, desde el Ejército se indicó que continuarán brindando apoyo al centro de diálisis.
