Ya ha pasado casi un mes desde que se paralizaron las clases para más de 300 alumnos de la Escuela Arturo Alessandri de Frutillar, recinto que se encuentra en serias condiciones de abandono.

Pese a lo anterior, todavía no se ha acordado una solución entre la municipalidad, los apoderados y profesores para destrabar el conflicto.

En ese contexto, este jueves, el alcalde Claus Lindemann dijo que la nueva propuesta es instalar los módulos o contenedores en los espacios de las antiguas dependencias administrativas de la empresa Lácteos Frutillar.

El presidente del Colegio de Profesores de Frutillar, Marco Mayorga, dijo que aún no han aceptado esa opción.

Los apoderados piden la pronta construcción de una escuela modular y desde el Gobierno anunciaron que tal edificación, una vez lista, tardaría unos 3 meses en ser acondicionada correctamente.

La situación los mantiene preocupados, pues no quieren que sus hijos pierdan el año escolar.