El gobernador de la provincia de Osorno, Daniel Lilayú, confirmó que tras el mejoramiento de las condiciones atmosféricas en la zona, se bajó la Alerta Roja que regía para esta zona.

De igual modo, la autoridad confirmó que mediante equipos de Vialidad se busca recuperar la conectividad en zonas donde los 150 milímetros de lluvia, que en 48 horas cayeron en ésta zona del sur del país, terminaron por llevarse puentes de madera, además de originar socavones y aislamiento de familias.

En el caso de la comuna de San Pablo, hay un socavón en la zona de Pufayo, donde la acumulación de agua se llevó parte de la faja de la red caminera. Mientras que el puente Pincoy, que permite el acceso desde y hacia la Ruta 5, también sucumbió ante la crecida del caudal.

Punto aparte es el caso de las familias de la localidad de Cancura. El gobernador indicó que la acción de un particular impidió la evacuación de aguas lluvias, lo que provocó la inundación de sus propiedades.

En la misma linea, se busca restablecer el contacto terrestre con decenas de familias que permanecen aisladas en el borde costero de la provincia de Osorno, particularmente en las caletas Huellelhue y Cóndor.

Otro de los conflictos que dejó el paso del frente, son los desagües que desde algunas rutas se producen hacia propiedades privadas.

La autoridad provincial relató el caso de los vecinos de Las Lumas, a 8 kilómetros de Osorno por la ruta a Puyehue, y la población Carrasco, en la comuna de Purranque, donde se hicieron las denuncias correspondientes.

En lo inmediato se realiza un catastro para conocer la cifra oficial de afectados por factores atmosféricos y, de esta manera, canalizar ayudas que van desde apoyo en forraje para su ganado, como aportes en enseres, colchonetas y alimentos.