Diversas opiniones políticas han surgido en torno a la posible extradición de Ricardo Palma Salamanca, quien fuera condenado por la justicia chilena como autor del asesinato de Jaime Guzmán, uno de los máximos ideólogos de la dictadura de Augusto Pinochet.

El senador UDI por Los Lagos, Iván Moreira, espera reciprocidad por parte de la justicia francesa, señalando que Salamanca es un asesino confeso.

Al contrario, la presidenta de la Unión Nacional de Ex Presos Políticos, Nelly Cárcamo, no entiende cómo la derecha ha puesto tanto énfasis en la extradición de Palma, siendo que no ha defendido los actos en contra de políticos de oposición en época de dictadura.

Rafael Escorza, exmiembro del frente patriótico Manuel Rodríguez y el vocero de la organización de Derechos Humanos Mauricio Hernández, explicó que Jaime Guzmán no fue asesinado sino que ejecutado, y explicó que un enjuiciamiento no debe ser condenado por el contexto político que se vivía durante el régimen.

Palma Salamanca fue detenido en París en febrero pasado, pero luego puesto en libertad provisional. Conocerá su destino el próximo 10 de octubre, cuando la Corte de Apelaciones gala decida si concede o no la extradición a Chile