La convocatoria abarcó todo el país. Por ello, en Osorno también se desarrolló la marcha por la defensa del agua y los territorios, sobre todo enfocada en los incipientes proyectos hidroeléctricos que mantienen en alertas a organizaciones sociales y comunidades indígenas.

Cristián Gáez, integrante del colectivo local Manos Construyendo, que acogió el llamado nacional de la manifestación, sostuvo que los principales objetivos son cambiar el Código de Aguas, pero también socializar con la comunidad la real situación de acceso al recurso natural.

En la provincia de Osorno, al menos desde 2012 existe tensión en comunidades indígenas, luego de que se conociera que cientos de solicitudes de derechos de aprovechamiento de agua o de minería se efectuaron en la zona rural, principalmente en comunas como Río Negro, Puyehue y San Juan de la Costa.

De acuerdo al investigador e integrante de la comunidad indígena Quillentuaiñ, Salvador Rumián, en la comuna costeña son más de 85 las que sobreviven sobre derechos no consuntivos, aún cuando podrían ser más al estar muchas veces los puntos sobrepuestos.

Las características geográficas de los terrenos donde se solicitan tales derechos son comunes: zonas de cauces correntosos, en altura o boscosa.

Si bien en 2012 la organización se propuso evitar que se adjudiquen tales derechos solicitados, ya tras casi seis años la preocupación es otra, pues varios de ellos ya han sido entregados e incluso se levantan proyectos en parques nacionales, como en el Puyehue.

Pero en otros, como el Maicopli, Liucura, Quillen, Huellelhue o Caleta Condor, sólo se espera conocer la naturaleza del proyecto y la realización de los estudios de impacto ambiental.