El alcantarillado de las calles de Osorno se había transformado en el dormitorio de Jorge Zambrano, de 43 años.
Por más de 28 años, el hombre, que perdió sus piernas a los 7 años tras ser atropellado por un tren, ha vivido en la calle, haciendo frente al día a día con una pensión asistencial y con lo que “machetea” en el centro de la ciudad sureña.
En este contexto fue cuando intervino Carabineros de Osorno, que dio con el improvisado domicilio de Zambrano, cuyo único bien de valor es su silla de ruedas, con la que se desplaza por los distintos lugares de la capital provincial.
Por ello, los uniformados se decidieron a apoyarlo, entregándole comida, frazadas y un pasaje para visitar a un amigo y, así, salir de la situación que lo aquejaba hasta ahora.
En conversación con Radio Bío Bío, Zambrano explicó que el dinero que recibe mensualmente sólo le alcanza para alimentarse.
“Es como una burla, no hago nada. Con esa plata no pago nada” explicó el hombre.
Antes de subirse al bus que lo llevaría a reunirse con su amigo, Jorge Zambrano dijo que volverá a Osorno en un tiempo más.
Regreso para el cual Carabineros estaría gestionando la posibilidad de conseguirle una casa y así evitar que vuelva a residir a las alcantarillas de Osorno.
