Gendarmes de Osorno señalan que ellos también viven en malas condiciones al interior de las cárceles del país.

La reflexión vino en voz de José Montecinos, suboficial de Gendarmería y dirigente local de la asociación de funcionarios de la institución, luego de conocer el informe encargado por la Corte Suprema y que reveló los oscuros detalles de las condiciones en las que miles de reos viven en 53 cárceles del país, donde destacan las largas horas de encierro, pocas comidas, malas condiciones de higiene, entre muchos otros.

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El dirigente indicó que la realidad de los penales es transversal en todo el país, dado que a la deficitaria infraestructura se suma el extenuante desempeño de los funcionarios, ya que así como los internos deben convivir con un hacinamiento extremo, la situación es muy similar a la de ellos.

Montecinos aclaró que el mismo drama enfrentan las funcionarias de Gendarmería, que carecen de espacios adecuados para su desempeño.

El funcionario coincidió en la reflexión que da cuenta que no se puede pedir reinserción social de la población penal si no están dadas las condiciones, entendiendo que los actores fundamentales en este proceso son los propios gendarmes que a diario conviven con la población penal, pero son los más olvidados en materia de mejoramiento en sus condiciones laborales.