En un reciente seminario, efectuado en la Casa del Folclor de Osorno y que se denominó “Extractivismo y Colonialismo en el Futahuillimapu”, se abordaron diversas visiones académicas y dirigenciales respecto al impacto de actividades económicas en el sur de Chile, principalmente en la vida de comunidades originarias y campesinas.

En la ocasión, se analizaron actividades como la forestal, acuicultura, minería o la generación eléctrica,los cuales registran mayor inversión y especulación en la región, sobre todo en comunas como San Juan de la Costa, Río Negro o Purranque.

De acuerdo a Héctor Nahuelpan, docente de la Universidad de Los Lagos, se trató de un seminario que partió desde el reconocimiento del escaso aporte de la academia en el tratamiento de temáticas importantes y contingentes de la zona.

Lo anterior, en la búsqueda del desarrollo sostenible que promueva la actividad económica, pero que no afecte a las comunidades campesinas y originarias.

Junto a la realidad de Chiloé o los efectos de la controvertida Ley de Pesca, fueron tratados y debatidos temas como el arribo de proyectos mineros o energéticos, el impacto de la salmonicultura o más aún de la plantación intensiva de especies exóticas de bosque.

En tal sentido, Jorge Hueque, werken del Parlamento de Koz Koz, en Panguipulli, contó su experiencia respecto a la contienda que por años mantuvieron con 7 grandes proyectos hidroeléctricos a desarrollarse en los lagos de la región de Los Ríos, que finalmente fueron desechados.

De todos modos, el dirigente hizo ver que al parecer se ha cambiado la estrategia por parte de los inversionistas nacionales o internacionales, pues tal como sucede en la provincia de Osorno, se estaría apuntando a la instalación de una central de pasada.

Estas no intervienen tanto las cuencas o lagos debido a su magnitud mucho más reducida, además que no requieren tantas exigencias en materia ambiental.