Una de las víctimas de Fernando Karadima, Juan Carlos Cruces, tildó la reacción del Comité Permanente de la Conferencia Episcopal como el actuar de una “especie de mafia”, por el apoyo al obispo de Osorno, Juan Barros.
En conversación con Radio Bío Bío, Cruz lamentó que la iglesia, a través de sus obispos, no brinden una mano a quienes claman por ser escuchados y solamente se preocupan de levantar una verdadera fortaleza en contra de los prelados que son cuestionados.
Indicó que este tipo de hechos lo único que provocan es un distanciamiento más profundo de la comunidad con la fe.
Agregó que tampoco le sorprende el apoyo que ha mostrado la Conferencia en favor de Barros, ya que es la misma actitud, señala, que adoptaron cuando quisieron denunciar los abusos cometidos por el ex párroco del Bosque, “lo blindaron e hicieron oídos sordos”.
Frente a la misiva entregada por el Comité Permanente de la Conferencia Episcopal, donde entrega el apoyo irrestricto para Juan Barros Madrid, Juan Carlos Cuz señaló que era de esperar una reacción así, ya que es conocido que actúan como “una especie de mafia” a la cual nadie puede llegar.
Recordemos que la misiva surge tras la protesta efectuada el pasado 18 de septiembre, donde nuevamente decenas de laicos se sumaron a la petición elevada hace más de 2 años, donde se exige la renuncia del prelado local.
