En 50 metros aumentará el ducto de descarga de Essal, donde vierten aguas mixtas al lago Llanquihue en Puerto Varas. Además se descubrió que existen varios puntos de descarga irregular aguas lluvias a la red de la empresa sanitaria.

Tras la conformación de una mesa de trabajo para tratar la contaminación que afecta al lago Llanquihue, se realizaron una serie de acciones tendientes a mitigar los efectos de las descargas.

Karina Morales, Encargada del Departamento de Medio Ambiente de la Municipalidad de Puerto Varas, estableció que uno de los acuerdos que se tomó es ampliar uno de los aliviadero que tiene Essal.

Hoy, el ducto está solo a 3 metros de la orilla, lo que dificulta la dilución y decantamiento de los residuos y se indicó que de aprobarse esta obra, los trabajos durarían menos de un mes.

Desde Essal, detallaron que cada vez que se vierten líquidos al lago, se notifica a la Superintendencia de Servicios Sanitarios e indicaron que han detectado varios puntos de descarga ilegal, donde particulares vierten aguas lluvias a la red matriz de aguas servidas y provoca que deban descargar las aguas al Lago Llanquihue.