Integrantes de la Agrupación de Laicos y Laicas de Osorno denunciaron haber sido agredidos tras protestar durante una ceremonia religiosa oficiada por el obispo Juan Barros.

Según informó Marío Vargas, el grupo de manifestantes llegó hasta la parroquia Sagrada Familia de Río Negro, realizando las acciones que comúnmente realizan, las que califican de pacíficas, desplegando carteles pidiendo la renuncia de Juan Barros a su cargo de Obispo, sin emitir consigna alguna.

Sin embargo, fueron recriminados por otros fieles católicos que se encontraban en el lugar, comenzando un conato verbal y físico que terminó con dos personas lesionadas.

Según Vargas también se afectó la ley de culto, pues fueron expulsados del templo católico.

Tras ello, concurrieron hasta el hospital local para la constatación de las lesiones y posteriormente a Carabineros a interponer la denuncia respectiva.

Se trata de otra arista más del conflicto surgido en 2015 cuando Juan Barros fue designado obispo de Osorno, recibiendo de inmediato críticas al haber sido parte de la parroquia El Bosque, dirigida por Fernando Karadima, sacerdote procesado por causas de abuso sexual.

De ahí en adelante se han registrado innumerables protestas contra el prelado, dentro y fuera de los templos, concitando apoyo comunitario, pero también detractores, así como aquellos que siente molestia al ver interrumpidas las ceremonias religiosas.

Si bien afirman que continuarán realizando la protesta silenciosa para exigir la renuncia de Juan Barros, Mario Vargas reconoció que el conflicto ha generado división en al comunidad católica.

Vargas anunció que la situación también será analizada legalmente, sobre todo tras haber sido expulsados del templo, acción que habría sido realizada por una religiosa presente en la ceremonia.