Durante esta semana y a partir de la conformación del comité de la cuenca del río Rahue y sus tributarios, la red ambiental ciudadana de Osorno dio a conocer su preocupación por los altos niveles de desechos domiciliarios, orgánicos, agrícolas, así como otros tipos de elementos que afectan a los esteros que cruzan la comuna.

Respecto a esta situación Ricardo Becerra, presidente de la agrupación, señaló que son preocupantes los actuales índices de contaminación existente en los diferentes afluentes, encargados de alimentar a los principales causes de la zona.

En este sentido, señaló que si bien gran parte de los esfuerzos están dirigidos a mantener descontaminados los ríos Rahue y Damas, también debe considerarse a los tributarios de éstos, pues finalmente son los encargados de alimentarlos, mientras que si estos están contaminados, esto será transmitido a lo largo del cause.

La preocupación no es menor, pues la mayor parte de los pequeños afluentes de los sectores rurales de la provincia y la comuna son los encargados de la distribución de agua para el regadío en la agricultura, así como para el consumo de animales, entre otras necesidades, lo que implica un riesgo para estas faenas, así como para la salud pública.

En este sentido, Becerra señaló que han solicitado a las autoridades medioambientales la realización de estudios en los distintos causes, así como establecer planes de limpieza y mantención.

Al respecto, Jorge Pasminio, seremi de Medio Ambiente señaló que el establecimiento de un plan de descontaminación es un proceso que toma bastante tiempo poner en ejecución, comenzando desde la aplicación de estudios para establecer los actuales niveles de saturación, hasta la implementación de un programa de descontaminación completo, sin embargo señaló que los algunos problemas pueden ser tratados de forma específica.

Finalmente, según señaló Becerra, la contaminación de estos ríos debe ser una prioridad para las autoridades del área ambiental, ya que son la base de la red fluvial encargada de alimentar a toda la zona, incluso para el consumo humano.